Aunque el número de fallecidos se ha reducido a más de la mitad en los últimos seis años, los meses de julio y agosto siguen siendo los que más víctimas registran en todo el año y es que, sin duda, el verano es una de las épocas del año con mayor volumen de accidentes por carretera.
A pesar de que los españoles cada vez salimos de vacaciones de manera más escalonada hay fechas muy señaladas en las que un gran número de vehículos coinciden en carretera. Los comienzos y finales de julio y agosto y también los cambios de quincenas de estos meses se convierten en fechas críticas, en las que se dispara el índice de siniestros de tráfico.
Un total de 262 personas fallecieron en accidentes de tráfico en las carreteras españolas durante julio y agosto de 2012, meses en los que se produjeron 78.823.217 desplazamientos de largo recorrido, una media de 1.271.342 desplazamientos diarios. Fueron 62 víctimas mortales menos (un 19%) que en 2011, lo que convierte al verano pasado en el de menos siniestros de este tipo de la historia.
El número de accidentes con víctimas mortales también se redujo de los 287 del verano de 2011 a los 238 sucedidos durante los meses de julio y agosto del año pasado (49 menos), lo que también representa una disminución del 17%. Pero a pesar de este dato ‘esperanzador’ de descenso de víctimas, siguen siendo muchos los que no regresan a sus casas tras las vacaciones.
Entre las principales causas de estos accidentes están el cansancio y la fatiga que producen los viajes de largo recorrido a los que se unen los nervios y las prisas por llegar a los destinos de vacaciones. Todo esto provoca un aumento de las distracciones en la conducción, que junto con una velocidad inadecuada, se convierten en los motivos más recurrentes para que se desencadene un accidente de tráfico.
Más del 90% de los accidentes de tráfico tienen su origen en un error humano por lo que muchos se pueden prevenir y evitar. Especial atención tenemos que poner cuando realizamos viajes cortos en nuestro destino de verano, la mayoría por carreteras convencionales. Y es que es en este tipo de vía donde se producen el 70% de los accidentes mortales, carreteras en las que suele predominar las curvas, cruces, adelantamientos y cambios de rasante.
¿Cómo podemos evitar los accidentes por carretera?
Un conductor que se pone a los mandos de un coche debe ir concentrado al cien por cien en las condiciones del tráfico para poder actuar y reaccionar correctamente. Es muy habitual ir distraído, pensando en otras cosas, con prisas… todos conocemos de sobra esos momentos de falta de atención.
Cada vez más, conducir se está convirtiendo en sinónimo de estrés, debido tanto al aumento de la densidad del tráfico como a los esfuerzos que conlleva sentarse al volante. Por este motivo no sólo es importante que el conductor tenga buenas aptitudes de conducción, también que esté preparado mentalmente para el esfuerzo que supone conducir un vehículo.
Dicho esto ya tenemos una de las claves para prevenir accidentes: conducir de forma serena y sin tensiones. Es difícil eliminar emociones al volante pero un conductor tiene que evitar transmitirlas a los demás.
La tarea de conducir un coche supone una gran responsabilidad para el conductor. Las distracciones son la principal causa de accidentes por lo que es imprescindible mantener una elevada concentración en la carretera para mejorar así el tiempo de respuesta. ¿Cuántas veces miramos hacia atrás si viajamos con niños o desviamos la atención de la carretera para cambiar un CD o para mirar el móvil…?
También es importante conocer nuestras limitaciones. Un conductor que se sobrevalora o no se encuentra en las condiciones físicas o psíquicas adecuadas aumenta las probabilidades de sufrir un accidente. También influyen en la prevención de accidentes el conocimiento de las normas de tráfico y la experiencia acumulada con la práctica. En este sentido es muy recomendable reforzar la formación en la conducción ante situaciones extremas con cursos específicos.
El conductor recibe aproximadamente el 90% de todas las informaciones a través de la vista. De forma continua el cerebro está procesando todas las informaciones recibidas a través de los sentidos y las traduce en maniobras. Y aquí encontramos otra clave para prevenir un accidente: desarrollar el sentido de la anticipación. ¿Y cómo lo consigo? Ampliando el campo visual, cuánto más lejos dirijamos la vista, mejor podremos anticiparnos a una situación conflictiva y más tiempo tendremos para reaccionar. Un dato a tener en cuenta es que a 130 km/h el coche avanza 36 metros (unos nueve coches compactos juntos) en un solo segundo. Salvar vidas puede depender de un único segundo.
Pero no solo con estar concentrados, conducir sin tensiones, conocer nuestras limitaciones o anticiparnos es suficiente también es necesario saber transmitir las órdenes al coche de una manera precisa, directa pero con suavidad. Los movimientos bruscos del volante pueden traer consecuencias negativas.
Un coche a 130 km/h avanza 36 metros en solo un segundo
Además de tener en cuenta estos factores que mejoran nuestra capacidad de respuesta ante un imprevisto o situación conflictiva, también nos puede ayudar a prevenir o evitar accidentes una correcta postura de conducción, descansar regularmente o mantener una temperatura agradable dentro del habitáculo.
Lo primero de todo es sentarse correctamente al volante. La distancia hasta los pedales y el volante es correcta cuando los brazos y las piernas están ligeramente flexionadas. La inclinación del respaldo debe formar un ángulo entre 95 grados y 115 grados, la inclinación de la banqueta es la adecuada cuando los muslos se encuentran bien apoyados y hay que colocar el reposacabezas de manera que su borde superior esté a la altura de las cejas. Puede parecer una tontería pero una correcta posición nos permite manejar bien el volante y ejercer la presión correcta en una frenada.
La monotonía del trazado de autopistas y autovías, el miedo ante los camiones que cambian de carril o el temor a coches que puedan ‘sobrevolar’ la valla protectora hacen que la tensión muscular sea mayor en este tipo de vías que en una carretera nacional o en ciudad. A este aumento de tensión se une el cansancio o la fatiga que generan los viajes de largo recorrido. Los expertos calculan que uno de cada cuatro accidentes mortales tiene su origen en el cansancio.
Cuando se hace difícil mantener la trayectoria, los párpados pesan cada vez más, aparece el sudor en las manos y en la frente y se sienten picores musculares hay que parar y tomarse un descanso. Son los síntomas más frecuentes antes de la cabezada y recuerda que cuando más tiempo se esté al volante sin descansar, mayor será el tiempo de reacción.
Lo recomendable es realizar una parada cada dos horas de conducción para estirar las piernas y refrescarse. A una mayor concentración y a una mejor capacidad de conducción también contribuye una temperatura agradable en el automóvil. Si tu coche no dispone de aire acondicionado aprovecha las primeras o últimas horas del día para realizar el viaje.
El coche también ayuda a evitar accidentes por carretera
Los nuevos sistemas de ayuda a la conducción, que ya incluyen muchos vehículos, juegan un papel muy importante en la prevención de accidentes o mitigación de sus efectos. Los fabricantes trabajan para mejorar la seguridad activa y pasiva de sus modelos lanzando nuevos sistemas que facilitan la conducción aunque sin olvidar que el conductor sigue siendo el único responsable.
Entre estos sistemas podemos destacar los que miden la distancia de seguridad con el vehículo precedente y te ayudan a frenar si detectna que el conductor no está pisando fuerte el pedal de freno; los que miden el nivel de atención del conductor según su forma de conducir y le avisan de que debe tomar un descanso; los que mantienen una velocidad de crucero elegida y son capaces de frenar a fondo y preparar el habitáculo ante una posible colisión; o los que detectan un vehículo que se acerca muy deprisa por detrás activando las luces de emergencia o incluso anclando el vehículo al suelo para evitar atropellar a un peatón.
También son muy útiles los sistemas que avisan de un cambio involuntario de carril o que controlan el ángulo muerto y otros sistemas encaminados a mejorar el confort en la conducción como climatización del habitáculo con filtrado de polen y sustancias nocivas, asientos con función de masaje, navegador GPS, y muchos otros.
Consejos para evitar los accidentes por carretera en viajes largos.
Antes de iniciar un viaje por carretera es conveniente seguir estos consejos relacionados con el vehículo y el trayecto. La prevención es la mejor arma para que nuestro viaje de vacaciones se realice con las mejores garantías. Nos los propone el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA):
Consejos para el vehículo para evitar los accidentes por carretera
•Comprobar todos los niveles del vehículo, como agua, aceite, líquido de frenos, líquido para el limpiaparabrisas, así como el estado de la batería (líquido y estado de los bornes).
•Llevar los neumáticos en perfecto estado, incluida la rueda de repuesto. Comprueba que lleven la presión correcta (+/-0,3 bar) y que el desgaste no sea mayor al límite legal (1,6 mm de profundidad mínima).
•Vigilar el estado de los amortiguadores, luces y sus repuestos.
•Disponer de los elementos obligatorios que, en caso de avería, debe utilizar: chaleco reflectante, pareja de triángulos de señalización de emergencia, gato, herramientas y fusibles de repuesto.
Consejos durante los viajes largos para evitar los accidentes por carretera
•Utilizar ropa cómoda y holgada.
•Antes y durante el viaje es conveniente ingerir una alimentación ligera, rica en proteínas y vitaminas, evitando las comidas grasas, con exceso de calorías o las flatulentas.
•Evitar el exceso de equipaje, y siempre que sea posible, no utilizar la baca del vehículo. No es aconsejable llevar objetos sueltos dentro del habitáculo y hay que evitar desplazamientos de equipaje dentro del maletero.
•El conductor y el resto de los ocupantes deben llevar siempre puesto el cinturón de seguridad. Los niños siempre deben ir bien sujetos con sistemas de retención infantil homologados a su peso y talla.
•No consumir alcohol ni drogas si se va a conducir: disminuyen los reflejos, crean una sensación de euforia y una falsa seguridad, incluso en sus niveles más bajos. Los accidentes de tráfico con alcoholemia positiva aumentan en más de un 40% en los meses de verano. Con una tasa de 0,1 de alcohol en sangre la probabilidad de tener un accidente es seis veces mayor que en estado sobrio mientras que con un 1,5 se multiplica por 25.
•Vigilar atentamente la circulación de la vía, no distrayéndose de la conducción. Las distracciones en la conducción provocan el 60% de los accidentes de circulación. Si el conductor quiere comer, beber o hablar con el móvil, tiene que hacerlo mientras para a descansar.
•Descansar cada 200 kilómetros ó 2 horas. Después de cinco horas de trayecto se duplica el tiempo de reacción.
•No superar en ningún caso los límites legales de velocidad, y mantener en todo momento la distancia de seguridad, circulando siempre por la derecha, incluso en vías de tres carrilles (el carril central es para adelantar, no para circular por él y el de la izquierda para adelantar a los que adelantan).
•Y recuerda que es obligatorio circular con el vehículo asegurado y llevar consigo toda la documentación del vehículo (ficha técnica, permiso de circulación, póliza del seguro e ITV al día)
Otras recomendaciones
•La vista es fundamental en la conducción por lo que es preferible viajar de día, sobre todo si somos propensos a dormirnos. Es importante que el conductor someta su vista a controles médicos regulares.
•No fijarse una hora de llegada al destino y al mínimo síntoma de cansancio, parar durante al menos 15 minutos o el tiempo necesario.
•Si se viaja con niños hay que buscar las horas de menor radiación solar -mañana o atardecer-, y hacer paradas periódicas.
•De igual forma, si se viaja con animales éstos deben de ir en dispositivos especiales y conviene parar cada dos horas para que estiren las patas y hagan sus necesidades.
•Si el conductor es alérgico y está tomando antihistamínicos, consultar al médico antes de viajar, ya que estos fármacos pueden producir somnolencia.
•Y no olvides que en los viajes cortos hay que tomar las mismas precauciones que en los largos desplazamientos.
... La gente que piensa que el carril izquierdo es suyo ... La gente que piensa que la distancia de seguridad es un mito ... O que quiere ver si el de delante tiene canas ... La gente que piensa que les cobran por poner los intermitentes ... La gente que cuando va a tomar u a salida en la autopista frena y se pone a 60 en medio de ella , en vez de usar el carril de deceleración.... La gente que aparca en doble fila... Y aunque pites y pites no aparecen ... Y cuando lo hacen encima se enfadan porque solo fue 5 minutos.... La gente que no se entera que no para en los pasos de cebra... La gente que no facilita la incorporación en los carriles de aceleración ... TODO ESTO NO SE ARREGLA CON MULTAS. El problema es que hay mucha falta de educación y respeto al volante ... Y no se porque pero suele pasar más , con vehículos de marca de renombre y alta gama...
#54 pues porque como llevan gama alta se creen los amos de la carretera. Ni más más, ni más menos