Audi Q8 Sportback e-tron: Tan eficiente como caro
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Audi Q8 Sportback e-tron: Tan eficiente como caro

Juan Carlos Grande

Juan Carlos Grande

9 opiniones

El Audi Q8 Sportback e-tron es la variante con carrocería “al estilo cupé” del SUV eléctrico de la casa alemana. En este artículo -y en el vídeo que tenéis bajo estas líneas- vamos a explicaros si se trata o no de un nuevo modelo, si tiene relación con el Audi Q8 sin apellidos y, por supuesto, cómo va, cuánto gasta y cuánto cuesta este lujoso vehículo familiar, así que ¡al lío!

Empecemos por el principio: ¿se trata o no de un nuevo modelo? Pues, en realidad, no: el Q8 e-tron es una puesta al día del anterior Audi e-tron (el que fuese primer modelo eléctrico de la casa alemana), que se ha visto acompañada de un cambio de nomenclatura para hacerla coherente con el resto de modelos de la actual familia e-tron. Así pues, el anterior Audi e-tron ha pasado a llamarse Audi Q8 e-tron, mientras que el e-tron Sportback ahora se llama Q8 Sportback e-tron. Sí, al revés: cosas del márketing.

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Lo que me lleva a la segunda pregunta: si ahora los e-tron se llaman Q8, ¿son entonces las versiones eléctricas del Audi Q8? Pues… no exactamente. Aunque es cierto que Q8 y Q8 e-tron comparten ciertos elementos estructurales y de plataforma, son automóviles de distinta concepción. Los anteriores Audi e-tron y e-tron Sportback fueron diseñados aparte y desde un principio para usar propulsión puramente eléctrica; y así continúa siendo bajo sus nuevas denominaciones. 

Exterior del Audi Q8 Sportback e-tron

Este es un SUV de gran tamaño que, gracias a las formas de su carrocería, disimula hasta cierto punto sus dimensiones.
Este es un SUV de gran tamaño que, gracias a las formas de su carrocería, disimula hasta cierto punto sus dimensiones.

Además de ser un SUV y ser eléctrico, el Audi Q8 Sportback e-tron es un coche voluminoso. No es que podamos calificarlo como un gigante, pero sí que mide 4,92 metros de largo, tiene una distancia entre ejes de 2,93 m, una anchura de 1,94 m y una altura de 1,62 m.

Por tamaño y forma, el rival más parecido podría ser el Polestar 3, otro SUV de gran formato con techo relativamente bajo e inclinado. Esto último es lo que diferencia al Q8 e-tron Sportback del modelo estándar, que presenta una silueta más acorde con el concepto de SUV tradicional aunque en realidad solo lo supere por 1 centímetro de altura en su punto más elevado.

Los retoques aplicados en este "restyling" con cambio de nombre acentúan la elegancia de su exterior.
Los retoques aplicados en este "restyling" con cambio de nombre acentúan la elegancia de su exterior.

Dado que el nuevo Q8 Sportback e-tron es, en esencia, una actualización del anterior e-tron Sportback, incorpora modificaciones que van mucho más allá de un simple "lavado de cara". Pero lavado de cara sí que ha habido; incluso algún retoque con bisturí. Lo deja patente su nueva parrilla, algo más grande y sofisticada, que luce la última evolución del logo de Audi, con los mismos cuatro aros pero solo dos dimensiones. Los faros no han modificado su carcasa pero sí su distribución interna, e incorporan un mejorado sistema de iluminación matricial.

También cambia el diseño de la sección inferior, que cuenta con persianas activas de refrigeración y ha optimizado el flujo de aire que pasa hacia las ruedas. Todo esto, junto al trabajo realizado en los bajos del vehículo, ha permitido rebajar dos centésimas el coeficiente de resistencia aerodinámica, que se queda en 0,24. También tienen su influencia el rediseño del paragolpes trasero, los nuevos modelos de llantas, y seguir ofreciendo unos retrovisores sin espejo que siguen siendo opcionales. Afortunadamente.

Interior del Audi Q8 Sportback e-tron

Su habitáculo apenas introduce cambios: simplemente, preserva su diseño y aporta algunas mejoras de equipamiento.
Su habitáculo apenas introduce cambios: simplemente, preserva su diseño y aporta algunas mejoras de equipamiento.

Si el coche ha cambiado de nombre y hasta cierto punto de apariencia, su interior es prácticamente el mismo. Nos sumergimos de nuevo en una ambientación sobria pero actual y sobre todo tecnológica, ya que el puesto del conductor sigue contando con la misma colección de pantallas digitales: la instrumentación configurable, las luminosas pantallas centrales con una clara respuesta al tacto, un head-up display opcional, y otra opción de equipamiento que es la más destacada de todas: las pantallas que actúan como retrovisores.

Los retrovisores con cámaras son, probablemente, el opcional más prescindible.
Los retrovisores con cámaras son, probablemente, el opcional más prescindible.

Es cierto que tanto dichas pantallas como las cámaras que las alimentan son muy nítidas y luminosas; pero tienen en mi opinión tres claros inconvenientes. Están situadas en las puertas -más abajo de donde las querríamos tener- abarcan un ángulo relativamente estrecho y su imagen es totalmente plana, sin percepción de profundidad. Se supone que la razón de ser de cualquier avance tecnológico es hacernos la vida más fácil; pero cuando no lo hace, solo es añadir tecnología por añadir tecnología. ¿Mi consejo? Quedaos con los retrovisores "de toda la vida".

Dejando a un lado esta cuestión, y un poco también la del exceso de superficies lacadas, el habitáculo presume de un nivel de acabado y calidad que se deja notar en todos sus botones y mandos así como en los materiales de recubrimiento y tapicerías. Esta sensación de calidad se percibe incluso en detalles como el hermetismo que transmite el cierre de las puertas.

La segunda fila de asientos es mucho más espaciosa de lo que parece cuando vemos el coche desde fuera.
La segunda fila de asientos es mucho más espaciosa de lo que parece cuando vemos el coche desde fuera.

Al pasar a la segunda fila nos encontramos con una facilidad de acceso mayor de la esperada: las puertas se abren mucho, dejan un hueco bastante amplio y el techo no queda bajo. Las dos plazas principales son amplísimas en todas las cotas; no tanto en cuanto altura, como es lógico, pero ponen de su parte un techo engañosamente alto que añade un rebaje interior.

Contribuyen a la impresión general de confort la luminosidad del techo panorámico, las relativamente amplias ventanillas -cuyos marcos ocultan con elegancia el color de la pintura- y las salidas de aireación situadas en los pilares y en la consola central, lugar desde donde podemos manejar el climatizador. Como punto negativo, la banqueta es fija, sin posibilidad de variar su posición ni tampoco el ángulo del respaldo.

Maletero del Audi Q8 Sportback e-tron

No es tan amplio como en la versión con carrocería SUV, pero el maletero del Sportback continúa siendo muy útil.
No es tan amplio como en la versión con carrocería SUV, pero el maletero del Sportback continúa siendo muy útil.

La boca de carga que descubre el portón trasero es razonablemente amplia, aunque el umbral queda bastante alto. En cuanto a capacidad con las cinco plazas en uso, mientras el maletero del Q8 e-tron ofrece 569 litros, en la versión Sportback debemos conformarnos con unos todavía útiles 528 litros. El espacio interior no ofrece gran altura pero sí buena anchura y sobre todo profundidad. 

También dispone de espacios separados por redes además de argollas para sujetar la carga. Es un maletero robusto y bien acabado en el que solo echamos en falta disponer de una rueda de repuesto y poder abatir los asientos de manera remota. Con los respaldos plegados, dispondremos de una capacidad máxima de 1.567 litros; y si nos tomamos el tiempo de levantar el capó delantero, podremos aprovechar los 62 litros de un cofre con tapa.

Motores y baterías del Audi Q8 Sportback e-tron

Las nuevas baterías presentan una densidad energética muy superior y permiten, por ello, prolongar ampliamente la autonomía de uso.
Las nuevas baterías presentan una densidad energética muy superior y permiten, por ello, prolongar ampliamente la autonomía de uso.

Ya hemos visto a qué afecta -y a qué no- este lavado de cara con lifting quirúrgico; pero como os dije, los cambios van mucho más allá. Y tienen relación con dos aspectos fundamentales: motores y baterías. Empecemos por estas últimas, que ahora ofrecen una capacidad notablemente superior.

Centrándonos en el caso que nos ocupa, el e-tron 55 (escalón intermedio de la gama entre el 50 y el SQ8, y al que corresponde la unidad probada), la batería de níquel-manganeso-cobalto ha elevado su capacidad desde los anteriores 87 kWh netos hasta 106 kWh nada menos. Cabe destacar que semejante incremento se ha logrado sin ampliar las dimensiones de la batería: lo que ha crecido es su densidad energética. El “truco” ha consistido en optimizar el empaquetamiento y distribución de las celdas, además de mejorar su química interna.

El incremento de potencia de carga con corriente continua puede hacer que nuestras paradas de recarga sean más breves.
El incremento de potencia de carga con corriente continua puede hacer que nuestras paradas de recarga sean más breves.

Otra ventaja de esta nueva batería es que ha ganado velocidad de recarga. Con corriente alterna sigue admitiendo 11 kW de serie y 22 kW como opción; pero con corriente continua ha pasado a aceptar hasta 170 kW, y con una curva de carga más plana que permite llegar al 80% en media hora. No hemos podido cargar con tantísima potencia pero sí con 150 kW, y doy fe de que mantiene potencias elevadas durante la mayoría del proceso.

Gracias también a la mejorada aerodinámica, la autonomía teórica del Sportback 55 e-tron ha pasado de unos 450 km a los actuales 595 km. Toca, pues, averiguar cuánto consume el Q8 Sportback e-tron 55. En nuestro habitual y variado recorrido de prueba hemos obtenido un promedio de 24,5 kWh/100 km, un poco por encima del máximo homologado en ciclo mixto (que es 24,1) y muy por encima del mínimo (que es 19,9). Y todo eso, tratando de sacar partido de los distintos modos de conducción y niveles de recuperación de energía cinética.

Los nuevos motores traseros son capaces de desarrollar la misma fuerza de giro empleando la misma cantidad de energía. Son, por tanto, más eficientes.
Los nuevos motores traseros son capaces de desarrollar la misma fuerza de giro empleando la misma cantidad de energía. Son, por tanto, más eficientes.

La batería no solo ha incrementado su potencia y capacidad de carga: también ha mejorado su eficiencia; y eso es justo lo que han hecho, por su parte, los nuevos motores traseros (aclaremos que, al igual que antes, el e-tron 55 monta un propulsor sobre cada eje). La potencia máxima total combinada sigue siendo la misma: 300 kW (es decir, 408 CV); pero al pasar de 12 a 14 bobinas, el renovado motor síncrono trasero puede generar el mismo empuje con un menor consumo energético. Momento, pues, de explicaros cómo va el Q8 Sportback e-tron 55.

De potencia ya os digo que no anda corto -de hecho podemos acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos-; pero de lo que no anda nada corta esta motorización es de par: hablamos de 664 Nm que, cuando pisamos el pedal a fondo, se notan bastante. Además, en este coche tenemos la sensación de que no desperdicia ni un kilovatio ni un caballo. Su capacidad de transmitir empuje y agarre es impresionante, y mucha responsabilidad recae sobre el siempre eficaz sistema de tracción total quattro -que no olvidemos, es el último apellido de este coche-.

Chasis del Audi Q8 Sportback e-tron

El Q8 e-tron nos brinda una experiencia de conducción a muy alto nivel, con independencia del ritmo que elijamos.
El Q8 e-tron nos brinda una experiencia de conducción a muy alto nivel, con independencia del ritmo que elijamos.

Que el consumo tienda a dispararse es algo hasta cierto punto comprensible en un SUV eléctrico de grandes dimensiones. Lo que parece mentira es lo bien que se mueve este SUV eléctrico que pesa casi 2,6 toneladas en orden de marcha.

Aquí, aparte de la tracción quattro, tiene mucho que ver un chasis de gran nivel -que incorpora suspensiones multibrazo en el eje delantero y el posterior-, una reajustada amortiguación neumática y un actualizado control de estabilidad que da un poco más de juego cuando conducimos con ganas de divertirnos. También ha sido revisada la dirección, que se sujeta al subchasis con unos cojinetes más rígidos y ha reducido su desmultiplicación. Por lo tanto es una dirección más rápida y mucho más precisa, que aporta sensación de agilidad al vehículo y confianza a su conductor. Es un coche que se siente más corto de lo que es; y eso que -lástima- no puede contar con un eje trasero direccional.

Sentados al volante, casi parece que estemos conduciendo un automóvil de menor tamaño y peso.
Sentados al volante, casi parece que estemos conduciendo un automóvil de menor tamaño y peso.

Para compensarlo de algún modo, la suspensión neumática se adapta mejor que nunca tanto a la conducción “alegre” como a la conducción “relajada”. Y en este último caso es donde creo que brilla especialmente el Audi Q8 Sportback e-tron; un SUV señorial, que resulta satisfactorio por su excelente calidad de rodadura, su excelente facilidad de conducción y la excelente insonorización de su habitáculo.

Precios del Audi Q8 Sportback e-tron

El modelo básico, llamado Audi Q8 Sportback e-tron 50 quattro, con 340 CV de potencia, tiene un precio de partida de 89.810 euros; mientras que el 55 quattro, en combinación con el acabado superior S line -al que corresponde la versión probada-, da un gran salto a los 408 CV… y a los 105.510 euros que cuesta.

Por desgracia, circular a diario en un automóvil de este calibre está al alcance de pocos bolsillos.
Por desgracia, circular a diario en un automóvil de este calibre está al alcance de pocos bolsillos.

Aunque trae bastante equipamiento de serie, la unidad que estáis viendo añade numerosas opciones; entre ellas, pintura de carrocería Marrón Madeira, llantas de 21” con pinzas de freno en rojo, cargador de 22 kW, retrovisores exteriores con cámaras, asientos deportivos de cuero y el paquete premium, que incluye faros matriciales, techo panorámico, una segunda toma de corriente y distintos elementos de confort y seguridad. En total, casi 20.000 euros en extras que suman unos perfectamente asequibles 125.170 euros.

  • Audi Q8 Sportback e-tron 55 quattro 408 CV: desde 100.010 €

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Pros y contras

Pros
  • Autonomía muy mejorada
  • Motores más eficientes
  • Conducción muy satisfactoria
  • Gran calidad de marcha
Contras
  • Retrovisores digitales inútiles
  • Precios ridículos
  • Opciones muy costosas
  • Peso bastante elevado

Galería de fotos de Audi Q8 Sportback e-tron: Tan eficiente como caro

Opiniones de Audi Q8 Sportback e-tron: Tan eficiente como caro

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p
pedro

El grupo VAG anda perdido en esto de los coches eléctricos....

A
Astro
| 2 respuestas

Estupendo reportaje , gracias, los coches tienen que despertar pasión, tienen que darle al interruptor de las emociones , tienen que decir algo , este es mudo es anodino como un Tesla

e
etj

Pues por estos a partir de 100.000 euros, te compras un Tesla Model Y Long Range por 49.000 (que más o menos da el mismo servicio, misma autonomía, espacio, etc) y por la diferencia te das un capricho en forma de Ford Mustang V8 (unos 57.000).

Juan Carlos Grande (coches.net)
Juan Carlos Grande (coches.net)

Gracias a ti, Astro.

A
Alberto
| 1 respuesta

Solo para millonarios, y tampoco es que tenga un diseño rompedor, grande Juan Carlos un trabajo de 10 como siempre. Los espejos prefiero ni comentarlo jaja

Juan Carlos Grande (coches.net)
Juan Carlos Grande (coches.net)

Aquí JC. Muchas gracias, Alberto.

Curro
Curro
| 2 respuestas

La verdad, después de tratar de entenderlo, no veo nada que justifique su existencia. Grande Juan Carlos, como siempre.

TP
Tío Perico

Estoy de cuerdo, no lo veo yo tampoco….

Juan Carlos Grande (coches.net)
Juan Carlos Grande (coches.net)

Gracias y un saludo, Curro.

AUDI Q8 Sportback e-tron de ocasión y Km0