La marca estadounidense Lucid, que ha anunciado su entrada en el mercado español, pero sin concretar la fecha, ha presentado en el salón de Los Ángeles su nuevo modelo Gravity, un SUV eléctrico de alta gama pensado para competir con el Tesla Model X y que ofrecerá una autonomía de hasta 700 km en una carrocería para un máximo de siete ocupantes. La marca ha anunciado un precio de comercialización en el mercado estadounidense que arrancará por debajo de los 80.000 dólares.
Pese a tratarse de un SUV la estética del modelo recuerda también a los vehículos familiares con una parte trasera en la que destaca el portón muy vertical y un techo en ligera caída desde el pilar C. La marca anuncia un coeficiente aerodinámico de 0,24, una cifra muy buena para un coche de este tipo que tiene una altura libre al suelo notable (15,5 cm) y una gran superficie frontal, aunque, eso sí, sin entradas de aire ya que en la parrilla está cerrada y solo hay una boca en la parte inferior que se cierra cuando no es necesaria la refrigeración de la batería.
Las grandes dimensiones del vehículo, que supera los 5 metros de longitud, permiten una disposición interior en tres filas de asientos con una segunda fila deslizante y la posibilidad de montar mesillas en los respaldos de los asientos delanteros. Tanto la segunda como la tercera fila, esta última apta para personas adultas, pueden plegarse y convertir el interior del vehículo en una especie de furgoneta capaz de ofrecer más de 3.100 litros de espacio para equipaje.
El diseño interior del Lucid Gravity
El diseño del salpicadero es, como en todos los coches eléctricos de alta gama lanzados últimamente, un canto a la sencillez y a la fluidez de líneas con una salida de aire lineal y la presencia de dos grandes pantallas flotantes. La de la parte superior, destinada a la instrumentación y al navegador es una pantalla curva de 34 pulgadas mientras que la inferior, destinada al equipo de entretenimiento, tiene formato horizontal y es de 12,5 pulgadas.
Contra lo que podría suponerse, el nuevo Gravity no hereda la plataforma del Lucid Air, la berlina de lujo con que se presentó la marca, sino que dispone de una plataforma exclusiva pensada para vehículos de tipo SUV con suspensión neumática variable opcional. La arquitectura del vehículo es de 900 voltios, dispone de motores de elevada potencia, muy compactos, anuncia una aceleración de 0 a 100 km/h en unos 3,5 segundos y una capacidad de arrastre de remolques cercana a las tres toneladas.
La marca anuncia la posibilidad de recargar en cargadores de hasta 350 KW, de modo que en 15 minutos se recuperan 275 km de autonomía. Lucid no ha anunciado todavía las especificaciones concretas ni de la batería ni de los motores eléctricos de que dispondrá el Gravity, aunque sí ha confirmado que el inicio de producción y las primeras entregas se realizarán a finales del próximo año 2024.