Han pasado más de dos años desde que Jeep presentase el Jeep Gladiator en el Salón de Los Ángeles (podéis ver la videonoticia en este mismo artículo, un poco más abajo). Ahora, Jeep ha organizado la primera toma de contacto con este nuevo pick-up basado en el Wrangler, el primero que lanza la marca americana en tres décadas. Lo probamos muy brevemente en un pequeño circuito de off-road en las cercanías de Madrid.
En España, el Gladiator se vende en acabado Overland y en el exclusivo nivel de equipamiento First Edition, que podrá adquirirse durante esta primera fase de lanzamiento.
Jeep ha escogido para el mercado europeo, como ya anunciamos en su momento, el motor diésel 3.0 MultiJet V6 que desarrolla 264 CV de potencia y 600 Nm de par. Se descarta, pues, el 3.6 V6 Pentastar, que sí se vende en otros mercados.
El Gladiator se ofrece con una paleta de colores que incluye nueve tonalidades exteriores: Negro, Rojo Firecracker, Billet Silver metalizado, Blanco brillante, Granite Crystal metalizado, Azul Hydro, Gris Sting, Snazzberry y Verde Sarge, en combinación con un techo blando o rígido negro o del color de la carrocería.
Los niveles de equipamiento Overland y Launch Edition montan llantas de 18 pulgadas, sistema Uconnect™ de cuarta generación con pantalla táctil de 8,4”(8,4”) y cuadro de instrumentos con una pantalla TFT de 7”, entre otros.
La versión Launch Edition viene de serie con cámara delantera, que permite ver fácilmente los obstáculos que se encuentran delante, tanto en rutas todoterreno como al viajar a diario por la ciudad.
Como opción se ofrece un sistema de audio premium Alpine de 9 altavoces con subwoofer trasero, amplificador de 12 canales de 552 W y altavoz inalámbrico Bluetooth portátil.
La versión Launch Edition, también incorpora un logo exclusivo, el techo rígido y los pasos de rueda del color de la carrocería, el revestimiento de la caja pintado, con Cargo Management Group y cubierta.
En el interior monta asientos de piel color negro, y como sistemas de seguridad destacan el de detección de ángulo muerto con Control de cruce en la parte trasera, el aviso de colisión frontal Plus, el control de crucero con función Stop y las luces de carretera con cambio automático, entre otros.
La versión Overland se vende ya en España a un PVP (sin incluir posibles promociones o descuentos) de 73.300€.
La versión Launch Edition sitúa su precio de venta en 78.800€.
Hacía años que Jeep hablaba de hacer un pick-up basado en el Wrangler. El. nuevo Jeep Gladiator viene a ser un Wrangler con caja, con mayor batalla y las mismas aptitudes todoterreno. Tiene un chasis 79 centímetros más largo que el de un Jeep Wrangler, con 49 centímetros más de batalla. Esto lo convierte en uno de los pick-up más grandes que se venden en Europa. Su longitud es de 5,60 metros, hace 1,89 de ancho y 1,90 de alto con la capota de lona. Son dimensiones considerables, que sobre el papel, no lo hacen muy manejable en ciudad, y teóricamente, tampoco en rutas off-road muy ratoneras, pero esto último ya os avanzo que no es así.
El nuevo Jeep Gladiator es herencia del primer pick-up de Jeep, construido en 1947 sobre la base del Willys, y su nombre deriva del Jeep Gladiator de 1962. Ahora vuelve a la carga en el segmento con una nueva variante sobre la base del último Wrangler, el JL. Aqui tenéis una videoprueba realizada durante el primer contacto con Wrangler en Austria. El nuevo Gladiator era muy esperado, después de que Jeep presentase, hace nada menos que 13 años, en 2005, un concept pick-up sobre la base del anterior Wrangler JK.
Esta mayor batalla del Gladiator respecto al Wrangler es la que ha permitido colocar una caja de carga. Los cambios estéticos respecto al Wrangler se perciben del pilar b hacia detrás, precisamente por incorporar ese espacio de carga que le da el aspecto pick-up esperado.
Esta caja tiene una longitud de carga de 1 metro y medio, suficiente para cargar una motocicleta de motocross(abatiendo el portón, eso sí). En este sentido, el Gladiator cuenta con un buen detalle: unas hendiduras en la pared de la caja en las que puede encajarse el neumático de la moto, para que la rueda delantera no se mueva durante los desplazamientos.
Esta caja puede equipar luces LED y raíles para sujetar los bultos, y se ve bien terminada. Cuenta con una toma de corriente externa de 220V. La puerta trasera, con cierre eléctrico, tiene amortiguación y tres posiciones de apertura.La rueda de repuesto se coloca bajo la caja, justo detrás del eje trasero.
Uno de los accesorios interesantes es la cubierta de lona, que se enrolla para recogerse y que permite acceder al espacio de carga de forma muy fácil y rápida. Tambien se ofrece una cubierta rígida como opción. La carga máxima de este pick-up es de 613 kilos y la de arrastre es de 2.721 kilos.
Un Wrangler por dentro
Las plazas delanteras son idénticas a las del Wrangler, como es lógico. El salpicadero tiene el aspecto de robustez que ya os comenté en la videoprueba del Wrangler, y destaca por sus línea horizontal superior combinada con una consola central muy vertical, con mandos de estilo retro, de auténtico TT.
Como el Wrangler, el Gladiator equipa la cuarta generación del sistema Uconnect que incluye Apple CarPlay, Android Auto y la posibilidad de escoger entre pantallas táctiles de 7.0 u 8.4 pulgadas.
En la consola central hay buenos huecos para dejar objetos y se ofrecen un grupo de botones para activar accesorios Mopar como el winch o las luces accesorias, por ejemplo. Por supuesto, en este pick-up la transmisión integral y la reductora se controlan por el método tradicional de palanca.
Los acabados interiores, uno de los puntos débiles de este tipo de vehículos, aparentan ser de calidad, y la sensación de calidad percibida es buena, al menos por lo percibido en esta primera toma de contacto.
La versión Overland, por ejemplo, viene de serie con el panel de instrumentos revestido en semipiel y rematado con doble costura. Ese mismo material reviste el interior de las puertas, a la altura del agarradero. La consola central se remata con acabados metálicos y una superficie de goma que recurre el perímetro de la pantalla digital. Nada que no hayamos visto en la última generación del Jeep Wrangler, y que la marca estadounidense traslada a su nuevo pick.up.
El Gladiator se fabrica en la misma planta de Jeep en Toledo (Ohio),
Buen espacio atrás
El Jeep Gladiator sólo se vende en versión doble Cabina, con techo rígido, desmontable, o bien con capota de lona. Es único pick-up descapotable del mercado.
En las plazas traseras hay buen espacio, aunque como siempre en este tipo de vehículos, la banqueta tiene el respaldo muy vertical y es algo incómoda para largos desplazamientos. Esta segunda fila de asientos dispone de un sistema interesante de plegado del respaldo, que permite convertirla en un pequeño espacio de almacenamiento cuando no se transportan personas. Y si se sube la banqueta hacia arriba se accede a un baúl extra de almacenaje, muy práctico, para colocar todo tipo de objetos. Incluso los pernos del techo se guardan en este compartimento, bien recogidos. Este baul inferior cerrarse con llave. No olvidéis que este pick-up, como el Wrangler, tiene el techo y las puertas desmontables, y el parabrisas abatible, por lo que conviene preservar los objetos almacenados de los amigos de lo ajeno.
Un motor de gasolina y otro diésel
El Jeep Gladiator se vende con motor turbodiésel de 3 litros y 260 CV, sólo con cambio automático de 8 velocidades. Es un motor que se nota muy cargado de par desde bajas vueltas (ofrece 600 Nm desde 1.400 r.p.m. y los mantiene hasta las 2.800 r.p.m.). Esto es muy interesante para facilitar el manejo del coche, sobre todo en situaciones de todoterreno en las que se necesite modular el gas y disponer de suficiente potencia desde un inicio.
En este sentido, os confirmo que el Jeep Gladiator se maneja más fácilmente de lo que parece. A pesar de sus dimensiones, dispone de un buen ángulo de giro para su tamaño, y esto facilita el tránsito por los sitios más angostos.
Los responsables de Jeep en España organizaron un pequeño circuito, muy ratonero, lleno de subidas y bajadas, que obligaban en ocasiones a hacer cruces de puentes, en el que este pick-up se movió con más soltura de la esperada. El empuje de su motor, la facilidad de manejo que da el cambio automático, y la efectividad de su transmisión 4x4 Select Trac, con caja transfer de dos velocidades, con una relación de reductora de 2,72:1, le da una efectividad para el todoterreno fuera de duda. De hecho, el Jeep Gladiator monta las mismas transmisiones que el Jeep Wrangler, que permiten circular en 2H, 4H, 4H con bloqueo y 4Low con reductora.
Excelente motricidad
Su comportamiento en off-road es similar al de un Wrangler. Copia muy bien el terreno, gracias al largo recorrido de suspensión; tiene una excelente motricidad, la que le concede también la efectividad de sus transmisiones; y se percibe robusto: monta ejes Dana 44 reforzados, y no resulta fácil golpear la carrocería, ni tan sólo la caja de carga, perjudicada por el voladizo trasero (25º de ángulo de salida). Su punto débil es el ángulo ventral (18,5º), fruto de su enorme batalla, que obliga a ir con mucho cuidado en las crestas.
La versión Overland, o la First Edition, que se empiezan a vender en España, vienen muy bien equipadas para el off-road. No llegan a la excencia de una versión Rubicon, pero se le acercan.
El Jeep Gladiator Rubicon sí que se vende en EE.UU, y monta, como el Wrangler, ejes Dana reforzados, pasos de rueda más altos, neumáticos de 33 pulgadas, barra estabilizadora delantera desconectable, barras laterales protectoras y transmisión Rock Track 4x4 con reductora ultra corta, entre otros. La versión Rubicon equipa, además de la cámara de visión trasera, una cámara frontal, integrada en la parrilla, para ver qué es lo que hay delante del coche, muy útil para off-road más extremo. Esta cámara frontal también viene de serie en el acabado Launch Edition (opcional en el Gladiator Overland), junto con algun otro "gadget" como el altavoz Bluetooth extraible.
Sistemas ADAS
Este pick-up viene bien equipado en cuanto a sistemas de seguridad y ayuda a la conducción. Destacan la cámara de visión trasera ParkView, que viene de serie, el detector de ángulo muerto y control de cruce marcha atrás, el aviso de colisión frontal plus con frenado autónomo y el control de crucero adaptativo con función de parada (opcional), entre otros.
Faltará comprobar más a fondo qué tal va en carretera y sobre todo, cómo se desenvuelve en pista y en off-road extremo, algo que desvelaremos en cuanto caiga una unidad de pruebas en nuestras manos.
Cochazo, lo llevaba pidiendo años... gracias Jeep.